¿Quieres ser mayor?

Pero no será así entre vosotros, sino que el que quiera hacerse grande entre vosotros será vuestro servidor, y el que de vosotros quiera ser el primero, será siervo de todos. (Marcos 10: 43-44)

En su sonrisa había una acuarela de sentimientos. Solo que en lugar de colores, se mezclaban cortesía, tristeza, rabia y rencor. Su brillante carrera profesional había ido por los aires. Por lo menos, eso creía Iris. La habían “rebajado” de puesto y estaba dispuesta a renunciar.

-Es lo mínimo que puedo hacer si me resta un poco de orgullo -me dijo, mientras enjugaba una lágrima discreta.

“Un poco de orgullo”. Tal vez ese fuese su problema y ella no lo percibía. Los compañeros la acusaban de ser una “alpinista”. Aquella que solo piensa en crecer y escalar sin importarse con los demás. Hasta que un día encontró alguien que le hizo una jugada sucia, le creó intrigas con los jefes y ahora se encontraba en esa situación desagradable.

El texto de hoy muestra que el Señor Jesús no vino a sacar del corazón humano el deseo de crecer profesionalmente. Nada hay de errado en aspirar a ser gerente o presidente. Ese es un sentimiento positivo, limpio y cristiano. No puedes acomodarte en la vida viendo el desfile de los victoriosos. Debes aspirar, mirar lejos, contemplar horizontes sin fin.

Pero Jesús vino a enseñar la manera de llegar a ser el primero. “No será así entre vosotros”, dijo, refiriéndose a la manera desleal y egoísta como las personas desean escalar, cuando no tienen a Jesús en el corazón.

Si deseas crecer, debes revisar tus motivaciones. ¿Qué es lo que te lleva a querer ser el primero? ¿El sueldo, los privilegios y el poder? ¿O el deseo de servir?

Si la motivación de tu trabajo es el deseo de servir y hacer felices a las personas, te sorprenderás con el resultado. La consecuencia natural será un cargo de liderazgo. El verdadero líder no es aquel que da órdenes sino aquel que es seguido y obedecido porque conquistó el corazón de sus colaboradores.

Simple de ser dicho. Difícil de ser vivido. Porque el orgullo te hace sentir que tú solo, puedes y que no necesitas de nada ni de nadie. ¡Mentira! La vida se encarga de mostrarte que no pasas de un simple ser humano.

¿Deseas ser próspero en tu vida profesional? Haz hoy y siempre, del consejo del Maestro, el blanco de tu vida: “Pero no será así entre vosotros, sino que el que quiera hacerse grande entre vosotros será vuestro servidor, y el que de vosotros quiera ser el primero, será siervo de todos”.

Alejandro Bullon