Imposible
Pero sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios, crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan. Hebreos 11:6
El capítulo 11 de la epístola a los Hebreos es el desfile de los hombres y mujeres de fe. Hijos maravillosos que hicieron feliz al Padre amado.
Para entender lo que el autor quiso decir es necesario saber lo que significa la fe. Existen muchas definiciones. La más simple de todas es confianza. Una sola palabra, pero define con exactitud lo que significa la fe. Tener fe es confiar. Cuando dices que tienes fe estás diciendo que confías. Cuando afirmas que un día tuviste fe pero que ahora ya no la tienes, estás queriendo decir que un día ya confiaste pero que hoy no confías más.
Pero tú no puedes confiar en alguien a quien no conoces y no puedes conocer a alguien con quien no convives.
Por lo tanto, la fe en Dios, demanda que lo conozcas y para conocerlo, necesitas convivir con Dios. Esto explica el versículo de hoy. El primer pensamiento es que sin fe es imposible agradar a Dios. En griego la palabra imposible es adunatos, que significa literalmente, “que no se puede desde ningún punto de vista.” Para entender el verdadero significado de esta palabra, tendrías que colocar la cabeza dentro de una vasija llena de agua y mantenla ahí por dos horas. Bueno, eso es adunatos. Imposible.
Quiere decir que así la vida, no es vida sin fe. Peor. Una vida sin fe entristece a Dios. No le agrada. En griego, eucaresteo, significa, que no lo deja feliz ¿Por qué? Porque la fe es confianza y cuando el hijo, a quien tanto ama, no confía en Él, Dios no puede estar contento con esa actitud.
Tú no fabricas fe. Las evidencias del amor y el poder de Dios son las que generan confianza en tu corazón. Pero cuando confías en tu padre, eres capaz de hacer cualquier cosa o ir a cualquier lugar, seguro de que si la orden vino del padre, no hay por qué temer, aunque las circunstancias sean difíciles y adversas.
Por eso hoy, camina de la mano de tu Padre amado, confía en Él aunque no veas nada. Él te ama y jamás te llevará a un lugar que te va a destruir. Y no olvides que “sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan.”